La interesante historia de Borgward comienza en la Alemania de los años veinte. Su fundador, Carl F. W. Borgward diseñó un puñado de modelos populares, entre ellos el Borgward Isabella, presentado en 1954, el cual se mantuvo en producción hasta 1961, cuando debido a problemas financieros la compañía tuvo que ser liquidada.
En 2008 la empresa fue revivida por el nieto de Borgward, Christian Borgward. Con el apoyo de Karlheinz L. Knöss, levantaron una planta con inversión china, y comercializaron los vehículos exclusivamente en ese país. En 2015 se presentó el primer automóvil de la nueva era de la compañía, el BX7 en el Salón del Automóvil de Frankfurt, y a principios de 2018 la firma regresará a su país de origen, Alemania, así como a algunos otros países europeos. Su entrada a Latinoamérica se espera para mediados de este año.
Y uno de los adelantos más llamativos de esta renaciente firma es el Isabella Concept, cuyas raíces se hunden en aquel popular vehículo de los años cincuenta, el único en esa época con suspensión trasera independiente. El concepto actual es una interpretación moderna del legendario modelo, y engloba la visión a futuro de Borgward. Las perfectas dimensiones (cinco metros de largo, 1.40 de algo y 1.92 de ancho) de este coupé eléctrico, así como sus esculturales líneas aerodinámicas basadas en el lenguaje de diseño “Impresión de flujo” de la firma, además de estar equipado con tecnología de vanguardia.