A principios de año, Baume & Mercier anunció su asociación con Indian Motorcycle, la empresa de motocicletas más importante de Estados Unidos. Esta colaboración tan original ha rendido frutos, materializados en el reloj Clifton Club Burt Munro Tribute Edición Limitada. Este cronógrafo, del cual se producirán sólo 1,967 ejemplares, además de rendir homenaje al legendario motociclista Burt Munro, es el punto de partida de una asociación basada en una visión compartida del estilo de vida.
La velocidad como necesidad
George Hendee y Oscar Hedstrom, fundadores de Indian Motorcycle, estuvieron siempre obsesionados con la búsqueda de la adrenalina causada por la velocidad. Primero la encontraron en el ciclismo, pero cuando aparecieron los primeros motores a gasolina se les ocurrió montarlos en los cuadros de unas bicicletas. De manera paralela al rápido crecimiento de Indian, ambos pioneros evolucionaron esas rudimentarias “motocicletas” y las llevaron más allá de sus límites a aventuras épicas y a carreras de circuitos. Pronto, Indian se convirtió en una prestigiada marca, capaz de establecer ininterrumpidamente nuevos récords de velocidad.
Ya en aquellos primeros tiempos, los motociclistas eran considerados temerarios adictos a la adrenalina. Y hoy en día, la excitación que produce montar uno de estos aparatos y competir a toda velocidad, sigue ejerciendo el mismo atractivo.
De todos los logros de Indian, el temple que dio pie a la leyenda de Burt Munro se ha convertido en la piedra angular no sólo de la empresa, también de la historia del motociclismo. Por esa razón Baume & Mercier eligió a este personaje para comenzar su asociación con Indian.
Cuando Munro compró su motocicleta en 1926, ésta sólo podía correr a una velocidad máxima de 90 km/h. Tras cuatro décadas mejorándola, a los 68 años la llevó al salar de Bonneville, en Utah (Estados Unidos), en donde estableció el récord de velocidad de 1000 cc con 294.5 km/h. Sin embargo, su hijo John descubrió que en el certificado de récord original de 1967 la velocidad media era incorrecta y que, en realidad, Munro había alcanzado los 296.11 km/h. Así, la cifra se corrigió y el récord quedó establecido desde entonces.
Un devoto de la velocidad
Burt Munro fue un personaje fascinante, que dedicó su vida al motociclismo. Desde pequeño comenzó a interesarse por la velocidad, y en la época en la que trabajó en la construcción se convirtió en piloto profesional, llegando a ser uno de los mejores motociclistas de Nueva Zelanda. En 1926 compró una moto Indian Scout de 1920, cuya velocidad máxima de 80 km/h le resultaba insuficiente. Así que inició un proyecto para incrementarla. Munro solía pasar las noches trabajando en su Scout y a la mañana siguiente, con apenas un poco de sueño, se iba a trabajar. El cascarón rojo aerodinámico que protegía su Scout, con el número 35 impreso en negro y amarillo, se ha convertido en un símbolo inconfundible de la resolución de este hombre a la hora de cumplir sus sueños y convertirse en leyenda.
La Indian más rápida del mundo
Munro viajó 10 veces al salar de Bonneville. Primero, para conocer el paisaje, luego para establecer tres récords de velocidad. El primero de estos récords lo consiguió en 1962 en la categoría de 883 cc, al alcanzar una velocidad de 288 km/h con el motor de su Scout mandrilado hasta 850 cc. Al cabo de cuatro años, en 1966, tras aumentar la capacidad del motor hasta 920 cc, estableció un récord de 270.476 km/h en la clase de los 1.000 cc. Un año más tarde, en 1967, después de mandrilar el motor unos 30 cc adicionales para alcanzar los 950 c.c., estableció el récord de la clase de 1.000 c.c. en 296,11 km/h, si bien en los entrenamientos había ido incluso más rápido, con una velocidad en una sola dirección de 305,89 km/h. En una ocasión, Munro rebasó los 320 km/h, pero no se trataba de un entrenamiento oficial y, por tanto, la marca no se contabilizó.
Burt Munro falleció en 1978, en un relativo anonimato fuera del mundo de los motociclistas adictos a la velocidad. Jamás hubiese imaginado tener la fama que posee hoy en día, cuatro décadas después de su muerte. Sin embargo, desde entonces su historia ha inspirado a varias generaciones. Burt solo quería ir rápido y establecer récords mundiales para dejar una huella de su paso por el mundo. Su vida quedó inmortalizada en la película Burt Munro: un sueño, una leyenda de 2006, protagonizada por Anthony Hopkins. Su biografía es una historia que incita a soñar y que Baume & Mercier ha hecho realidad en un reloj de diseño atemporal. La Manufactura siempre ha amado rendir homenaje a las aventuras humanas y celebrar los momentos extraordinarios. Mediante este reloj excepcional de edición limitada, Baume & Mercier narra una historia que, más allá del diseño, trata de un hombre apasionado, para que perdure en el recuerdo.
Para rendir homenaje a este 50º aniversario, Baume & Mercier ha diseñado un reloj único. Munro, un hombre de ingresos modestos, construyó la Scout con la que cosechó todos sus récords utilizando herramientas básicas e incluso llegó a realizar algunas partes del motor con metal recuperado a lo largo de 40 años. El portador del reloj oficial de Indian Motorcycle podrá exhibir su muñeca con orgullo, como recordatorio de que con valor y determinación todo es posible. Además, el modelo transmite un ideal de pasión, uno de los valores tradicionales de Baume & Mercier.
El Clifton Club Burt Munro Tribute Edición Limitada
Con este modelo de edición limitada, Baume & Mercier celebra a una leyenda, un héroe de la velocidad y, al mismo tiempo, inicia su nueva asociación con la Indian Motorcycle Company, en la misma línea que el exitoso Shelby Cobra. Este cronógrafo automático de edición limitada cuenta con varios detalles especiales, concebidos para conmemorar la extraordinaria hazaña de Burt Munro. El más evidente es la presencia del «35», el número de la suerte de Munro, en cifras grandes y amarillas en el segundero del cronógrafo. Por otra parte, el color «rojo Indian» de la correa de piel de becerro evoca el bermellón característico de la Indian Motorcycle Company, así como el color de la Munro Special. La esfera es de color plateado con acabado arenado y decoración «snailed» en imitación de la superficie del Salar de Bonneville, escenario del récord de Burt Munro. El contrapeso del segundero del cronógrafo es la «I» de Indian, reconocible al instante. La caja de acero inoxidable de 44 mm cuenta con una escala de taquímetro en el bisel donde se han resaltado las 184 millas por hora (296.11 km/h) del récord. En el fondo se han grabado el célebre logotipo Indian Headdress de la Indian Motorcycle Company y el número de la edición limitada. El modelo Clifton Club Burt Munro Tribute se lanza en una edición limitada de 1.967 ejemplares en homenaje al año en que Munro estableció su récord. Este reloj exclusivo se presentará por primera vez en EICMA, la feria de motociclismo más grande del mundo, que se celebrará en Milán (Italia) del 7 al 12 de noviembre de 2017.
El espíritu de Munro continúa
En agosto de 2017, medio siglo después del récord de Burt, el equipo de Indian Motorcycle regresó a Bonneville con Lee Munro, sobrino nieto de Burt. Para rendir homenaje a su familiar, Lee Munro se disponía a pilotar una Indian Scout moderna con el patrocinio y el apoyo de Baume & Mercier. El chasis de la Scout, creado por el departamento de I+D de Indian, se combinó con un motor Scout bicilíndrico en V modificado y un carenado aerodinámico. Tras un ingente trabajo en su tiempo libre, el equipo creó una nueva motocicleta de alta velocidad. Para las pruebas, Lee Munro y el equipo llevaron la «Spirit of Munro Scout» al lago seco El Mirage, donde establecieron un nuevo récord de velocidad en tierra de 300 km/h en la categoría de Motocicletas Aerodinámicas Parcialmente Modificadas de 1.350 cc de la Southern California Timing Association. En la 69 sesión de la Semana de la Velocidad de Bonneville, celebrada en agosto de 2017, Lee y el equipo de Indian alcanzaron los 307,39 km/h, superando el récord establecido por Burt, y se quedaron a las puertas de la emblemática marca de 200 millas por hora (unos 320 km/h) a causa de varios problemas mecánicos.
Baume & Mercier se sintió orgullosa de participar en este homenaje y de patrocinar estos momentos inolvidables y llenos de emoción.