A unas cuantas horas de que dé inicio la aclamanda carrera de las 24 Horas de Le Mans, TAG Heuer acogió en Mónaco al actor Patrick Dempsey, embajador de la marca, para un entrenamiento poco convencional. El actor, a su vez piloto y propietario del equipo Dempsey Racing, que participará en la competición este fin de semana, se ha desplazado hasta el circuito de Var en Le Luc al volante del Porsche 911 RS verde intenso de la colección privada de automóviles de S.A.S. el príncipe Alberto II de Mónaco, cuyo TAG Heuer ha sido seleccionado como Reloj Oficial.
El día anterior, Patrick Dempsey asistió a un cóctel organizado en el seno de esta colección de exclusivos automóviles. Allí tuvo el placer de reunirse con otros invitados de honor: Jack Heuer, presidente honorario de la marca y bisnieto del fundador, Aurel Bacs, experto en relojes de colección; Sanjay Hinduja de Gulf Oil International, Roald Goethe, propriétaire de ROFGO Racing y la influencer del mundo automovilístico Supercarblondie. Y, por supuesto, no podían faltar la princesa Estefanía de Mónaco y sus hijos Pauline y Louis Ducruet, y también Camille Gottlieb, descendientes del príncipe Alberto I. Esta bonita foto de familia reúne a diferentes generaciones en el preámbulo de una intensa carrera en Le Mans, para celebrar los estrechos lazos que Tag Heuer mantiene con el Principado de Mónaco y dar el pistoletazo de salida a una competición que recorre las pistas de la magnífica Costa Azul francesa.
Se trata de un recorrido muy delimitado, pues corresponde a una parte de la ruta recorrida por el príncipe Alberto I de Mónaco cada año desde comienzos del siglo XX. El trayecto, marcado con grafito por el propio príncipe, figura en un mapa que data del año 1904 y que actualmente se expone en el museo tras haber sido restaurado por TAG Heuer en el marco de su asociación con este museo. Vuelta a una epopeya histórica.
En 1902, el príncipe Alberto I, conocido con el apodo de «príncipe aventurero», decide recorrer Francia en su moto Humber, de fabricación inglesa. Desde Mónaco, llega hasta París y, más tarde, hasta Deauville: el trayecto de cada año nunca es el mismo que el anterior. Uno de sus viajes le llevan a Le Luc. A partir de 1904, decide registrar sus rutas en un gran mapa de Francia, denominado «el mapa del príncipe».
Hoy, la moto Humber, reconstruida por Philippe Renzini, director del Museo del Automóvil de Mónaco, se exhibe junto al mapa del príncipe en el corazón del museo. Es así como TAG Heuer, en calidad de Reloj Oficial del museo, decidió restaurar este mítico mapa y emprender la misma ruta recorrida por el príncipe desde Mónaco hasta el circuito de Var en Le Luc, esta vez acompañado por Patrick Dempsey y otros invitados especiales.
En el circuito, el grupo tuvo la ocasión de dar unas vueltas a la pista al volante de coches de carreras únicos y diferentes entre sí: un Porsche 911 GT3 RS, un Porsche classic type 964, un Porsche Panamera GT3, dos Porsche GT3 RS Cup de competición y una réplica del Ford GT40, modelo con el que el equipo Gulf Racing se alzó con su primera victoria en las 24 Horas de Le Mans… ¡hace exactamente 50 años!
