Es el golpeteo, el ritmo con la barra espaciadora y la campana final, el cambio de renglón y el presionar cada tecla como si se tratara de un piano lo que le fascina a Tom Hanks de atacar con sus manos e imaginación a una máquina de escribir. Si visitas al actor de Apollo 13 y Náufrago en su casa, seguramente te ofrecerá uno de sus más de 250 modelos, pero con la advertencia de que debes usarla y alguna vez escribirle una tarjeta de Navidad, tal como él lo hace cada año a sus mejores amigos.

Escuchar a Hanks, de 61 años, hablar de máquinas escribir, es como estar ante un vendedor de autos de los años cincuenta, listo para darte las particularidades de cada aparato. Su fascinación es tal, que incluso fue parte de un documental estrenado en 2017 llamado California Typewriter en el que muestra su fascinación porque sus dedos se deslicen en ejemplares que datan de los años treinta.

Ese amor por las máquinas de escribir no se quedó en la superficie. El protagonista de Tienes un e-mail utilizó cuanto rato libre tuvo en su apretada agenda para plasmar en tinta sobre papel las historias que se le venían a la cabeza. El esfuerzo de Hanks se materializó con la recién publicación de su libro Uncommon Type: Some Stories, una compilación de 17 cuentos originales que exploran lo mismo el cómo una mujer recién divorciada se ajusta a su vecindario, que la odisea de cuatro amigos que van y vienen de la Luna a bordo de un cohete construido en su patio trasero.

Y es que Hanks, como todo buen actor, es un enamorado de contar historias. Lo mismo lo hace como un ciudadano de a pie que debe encontrar algo especial en su vida como Sam Balwin en Sintonía de amor, como Andrew Beckett en Filadelfia o Paul Edgecomb en Milagros inesperados, que al personificar a un ser con el espíritu de niño en su vida, como en Quisiera ser grande y Forrest Gump.

La pantalla de cine, tal como una página en blanco montada en el rodillo de la máquina de escribir, ha sido marcada con más de una hazaña de este interesante hombre, nacido en California. Lo mismo es un astronauta en Apolo 13 que un vaquero al prestar su voz al sheriff Woody en Toy Story, o que un líder de pelotón en Rescatando al soldado Ryan. Incluso ha sido capitán de barco y de avión en Capitan Phillip y Sully. Así, ha pasado por las profesiones que todo niño sueña con llegar a ser algún día.

 

Temas que dejan huella

Su fascinación por la historia lo llevó a producir la miniserie De la Tierra a la Luna, que cuenta la odisea del programa Apolo por alcanzar este añorado satélite. Luego, en 2001 Hanks se asoció con su amigo, el director Steven Spielberg, para producir Band of Brothers, reuniendo a actores e historiadores para compartir los sacrificios de la llamada

“Gran Generación en la Segunda Guerra Mundial”. Lo mismo sucedió en 2010 con The Pacific para HBO.

Colega, aliado y mejor amigo de Steven Spielberg, para quien ha actuado en una quinteta de películas, incluyendo la recién The Post, parte de la temporada de premios 2018, Hanks ha sido abrazado por el director de E.T., el extraterrestre, como el moderno James Stewart, alguien que representa al hombre común expuesto a circunstancias extraordinarias.

En los últimos cuatro años, Hanks se ha asociado a CNN, para estar seguro que el golpeteo de la historia se queda registrado en documentales de una hora que abordan temas sociales, culturales, políticos, de cultura pop y avances tecnológicos, peinando las décadas de los años sesenta (The Sixties), setenta (The Seventies), ochenta (The Eighties) y noventa (The Nineties).

 

Una reconocida trayectoria

Hank es conocido lo mismo en los pasillos de Hollywood, que en la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas que le ha dado dos Óscar como Mejor Actor. En Broadway fue nominado como Mejor Actor por Lucky Guy, escrito por su amiga Nora Ephron (Tienes un e-mail) y en televisión ha cosechado un racimo de Emmys por sus series históricas. También carga sobre sus hombros la exitosa franquicia de El código Da Vinci y es, sin duda, alma de la serie cinematográfica Toy Story.

En tiempos de nubes negras sobre Hollywood, Hanks es referente de integridad, en tanto que su matrimonio de 30 años con Rita Wilson, lo presentan como el estadounidense modelo. El propio Obama le puso la medalla presidencial de libertad a Hanks.

Nada mal para alguien que comenzó sus días como comediante de club y quien desde su lugar bajo el reflector, se dio cuenta que el mundo lo amaba y él podía amarlo de vuelta.

 

 

 

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