La pasión gastronómica según Pagano, restaurante en Masaryk

Por: Andoni Aldasoro / Fotos: Cortesía Pagano

Si la avenida Masaryk, en el Polanco más exclusivo, es sinónimo de algo, lo es de «lujo», tanto en las múltiples boutiques de ropa de diseñador para mujeres, hombres y niños, como joyerías de la mejor hechura y variedad, así como bares y restaurantes; es en este último rubro en que la vistosa vialidad ha despuntado en los últimos años. Y la reciente apertura de Pagano sólo viene a confirmarlo.

Bajo la batuta gastronómica del experimentado chef Norberto Hermida, con un notorio gusto por la cocina asiática y con experiencia previa en el restaurante Anastasia, ubicado al sur de la Ciudad de México, exactamente en Pabellón Altavista; Pagano logra una mezcla entre la cocina tradicional mexicana con tintes ibéricos, sumando métodos y procedimientos de los países orientales en donde el chef Hermida ha trabajado. La “experiencia”, como han querido abordar el acto de comer, se divide en cinco grupos: Iniciación, el momento de las entradas, aquí recomendamos el aguachile negro hecho de cortes finos de pescado con un aguachile a base de jalapeño quemado; en Raíces, el segundo momento, encontramos el apartado de las ensaladas y los productos de mar y de la hortaliza, debes probar la ensalada de lechuga con camarones asados, pera asiática, fideo de arroz y sésamo negro. El tercer momento se llama Ceremonia, y destacamos el cabrito sellado a las brasas y laqueado. La ocasión para olvidar las posibles culpas cometidas hasta el momento llega con la Expiación, la hora del postre, para la que recomendamos el brulée de elote con helado de vainilla y mezcal. Para finalizar están los Elíxires, una amplia gama de cocteles y botellas de vino.

El ambiente del restaurante es tranquilo durante las horas de la tarde, convirtiéndose en el destino ideal para el after office; por las noches se torna más animado, ideal para cenas y el precopeo.